El experto en pintura Mauro Henrique le muestra al presentador Kevin O'Connor un error común que cometen los aficionados al bricolaje al calafatear y un consejo útil para evitarlo.
El experto en pintura Mauro Henrique le muestra al presentador Kevin O'Connor una mejor manera de calafatear. Después de mostrarle a Kevin cómo la mayoría de la gente calafatea y por qué no le gusta la técnica, detalla los puntos más finos (literalmente) del calafateo.
5 consejos simples para usar masilla
1. Grietas y brechas suceden
Hay muchas razones por las que se producen grietas y brechas: el secado y la contracción de los materiales pueden causarlo, al igual que el asentamiento de los cimientos, solo por nombrar algunos. Sin embargo, es importante saber que suceden, y calafatearlas puede hacer que desaparezcan.
Pero simplemente apretar gotas de calafateo en un espacio no servirá.
2. No sobre calafatear
La mayoría de los propietarios de viviendas y los aficionados al bricolaje cortan los tubos de calafateo demasiado arriba del tubo, creando un agujero en el extremo del tubo de calafateo que es demasiado grande. Esto los obliga a colocar una gota grande y redonda de masilla a lo largo del espacio, que luego deben empujar dentro del espacio con los dedos, lo que hace que el exceso de masilla se escurra a lo largo de la pared o la moldura. Esto es un desastre y, por lo general, un desperdicio de masilla. Afortunadamente, esto es evitable.
3. Cortar un agujero más pequeño
El primer paso es cortar un agujero más pequeño. Mire la grieta o el espacio en cuestión para tener una idea de qué tan ancho es. Muchos tubos de calafateo tienen líneas que indican dónde cortar el tubo para un tamaño de orificio específico. Para aquellos que no lo hacen, comience más cerca de la punta para agujeros más pequeños y más lejos para agujeros más grandes. El objetivo es hacer coincidir el tamaño del agujero con el espacio.
Sosteniendo el tubo en un ángulo (generalmente de 30 a 45 grados) use el cortador de punta incorporado en la pistola de calafateo para cortar la punta. Use el atizador debajo de la pistola de calafateo para romper el sello.
4. Fuerce el calafateo en el espacio mientras lo aplica
Coloque la punta del tubo de calafateo en el espacio y coloque la yema del dedo índice en la parte posterior de la punta. Mientras aprieta el mango de la pistola de calafateo, arrastre la punta a lo largo del espacio mientras mantiene la presión sobre la punta del dedo índice, forzando la masilla en el espacio.
5. limpiar el exceso
Esta técnica combina aplicar la masilla y forzarla en el espacio en un solo paso, lo que minimiza la cantidad de tiempo que se tarda en sellar y limpiar. Sin embargo, aún puede ser necesario retocar los espacios restantes o limpiar cualquier exceso. Con la punta de un dedo mojado, arrástrelo a lo largo del espacio para eliminar el exceso de masilla antes de limpiar cualquier resto con un trapo húmedo.